Comparto, con ustedes, este texto
de Eduardo Galeano:
La extorsión,
el insulto,
la amenaza,
el coscorrón,
la bofetada,
la paliza,
el azote,
el cuarto oscuro,
la ducha helada,
el ayuno obligatorio,
la comida obligatoria,
la prohibición de salir,
la prohibición de decir lo que se piensa,
la prohibición de hacer lo que se siente,
y la humillación pública
son algunos de los métodos de penitencia y tortura tradicionales en la vida de
familia. Para castigo de la desobediencia y escarmiento de la libertad, la
tradición familiar perpetua una cultura del terror que humilla a la mujer,
enseña a los hijos a mentir y contagia la peste del miedo.
—Los derechos humanos tendrían que empezar por casa —me comenta, en Chile, Andrés Domínguez.
Eduardo Galeano
De: “El libro de los abrazos”
Nota: este texto es aplicable a la
violencia hacia la mujer y, también, a la que se ejerce contra los niños y los
adolescentes.